jueves, 16 de octubre de 2008

Las Ofelias sin razón.

Sobre "La razón de las ofelias" - Montaje de danza contemporánea del grupo L'Explose.


En estos días he visto varias obras de las que pasan por la cartelera bogotana, unas muy malas y otras no tanto. Vale la pena destacar entre las malas a Strippers, una obra carente de todo: muy mal escrita, mal actuada y pésimamente dirigida. Perdón por el paréntesis, pero tenia que hacerlo; además Strippers no se merece un artículo completo.

Volviendo a lo nuestro, hoy quiero hacer mis comentarios sobre La Razón de las Ofelias, el último estreno de la compañía de danza contemporánea L’explose, bajo la dirección de Tino Fernández.

Es importante para una compañía de este prestigio tener una identidad y una manera particular de contar sus historias, pero en éste caso en especial, se nota en varios de los aspectos de la creación un estancamiento del concepto que aburre y no sorprende.

Las coreografías son muy similares a lo que ya vimos en la Mirada del Avestruz y en Frenesí: movimientos repetitivos de brazos, diagonales y arrastradas; en general toda la partitura es simple tirando a pobre, pero sobre todo no es para nada novedoso.

Me parece que una obra tan carente de dramaturgia por lo menos debería tener buenos momentos coreográficos (danza) para tapar la falta de contenido. Todo pasa sin una razón aparente y por eso el título de este artículo; son unas mujeres haciendo un poco de garabatos que vienen de la nada y no llevan hacia ninguna parte; además, no entendí el personaje de la mujer de blanco que se supone lleva el hilo conductor; más parece una mujer sacada una tragedia griega, no logra ninguna identificación y ni hablemos de los solos de las bailarinas que son fatales.

Hay una cosa bien clara y es que es una obra de mujeres, con mujeres y para mujeres, mi señora lloró el día que la vimos, y nunca entendí por qué; me preocupa que ella algún día esté pensando en amararme las manos con cinta para después torturarme como a la pobre niña de la obra. El caso es que yo no sólo no entendí nada, no sentí nada. El no entender es normal cuando no hay dramaturgia, pero el no sentir se lo tengo que achacar a la falta de interpretación de las bailarinas. Una pieza como La razón de las Ofelias, tiene una carga emocional que no está en la historia como tal, porque no la hay, y eso está bien, pero requiere que sus intérpretes sí tengan esa carga, y por lo menos yo tengo que ver en ellas toda esa locura que están planteando. Gracias a los dioses está Natalia Bedoya que no sólo canta maravillosamente y baila como una profesional, además actúa, cosa que se agradece montones… si no fuera por ella y por el señor Ara Malikian (violinista) la obra podía llegar a ser un completo desastre. La conclusión aquí es: si no bailan por lo menos actúen, o pretendan actuar.

Muy a pesar del vestuario que me perece repetido, horrible y sin diseño, la obra se ve bonita, los elementos tienen gusto y ayudan a darle vida al concepto visual; muy bien por Philippe Legler que logró una estética agradable con su escenografía y ni hablar de la iluminación, que siempre resulta siendo un factor decisivo y predominante en la estética de L’explose; una y otra vez Humberto Hernández con su gran talento logra darle una factura impecable a los trabajos de esta compañía y más en esta ocasión, donde la falta de color y lo mediocre del vestuario lo hacen mas difícil. Por suerte Tino Fernández cuenta con unos colaboradores trabajadores y talentosos que le ayudan a tapar sus carencias como coreógrafo.

En cuanto al video no hay mucho de que hablar. Si no existe, no pasa nada.

Aunque la puesta en escena no es arriesgada, la obra logra conmover al público femenino y bueno, este director sabe editar muy bien sus piezas, porque siempre le quedan con buen ritmo y tiene un gran talento escogiendo la música, se le aplaude el haber utilizado los servicios de Camilo Giraldo, quien promete mucho en este tipo de composición tan compleja.

Para fortuna de L’explose, ésta es otra obra exótica para el mercado Europeo donde seguramente tendrá mucho éxito.

Justo CF.